El torneo argentino tendrá un nuevo formato. La Copa de la Liga Profesional presentará una definición con eliminación directa y descensos. Continuar leyendo
Un mes transcurrió desde la finalización del torneo anterior. La pálida igualdad en cero entre Banfield y Arsenal significó el punto final de esa edición. Aunque esa definición careció de suspenso por la gran ventaja que sacó River. El eventual campeón confirmó su consagración tres jornadas antes del cierre oficial, por lo que la emoción quedó de lado con mucha anticipación.
Lo bueno es que en el próximo certamen no se repetirá la historia. El Millonario seguramente será el firme candidato a quedarse con el título, pero esta vez deberá transpirar hasta el último minuto. Esto no tiene que ver con que haya perdido varios jugadores de su plantel. O que los demás conjuntos se hayan colocado a la par de la escuadra comandada por Marcelo Gallardo. Pueden suceder esas dos cosas durante la pretemporada, aunque el motivo real es otro.
La razón por la que la Copa de la Liga Profesional será más pareja es muy sencilla. El formato que presenta hace que haya mayor incertidumbre porque habrá juegos de eliminación directa. A continuación explicaremos el formato con más detalles porque difiere de lo acontecido en el campeonato reciente, cuando fue un normal todos contra todos y el primero de la tabla de posiciones se llevaba la corona.
Por lo pronto, habrá 28 participantes. A los 26 conjuntos del año pasado se añadieron los ascendidos Tigre y Barracas Central, la institución ligada de manera muy estrecha con el presidente de la AFA Claudio Tapia. La decisión de eliminar los descensos desde la expansión del coronavirus en 2020 hizo que ahora haya una cantidad superior de equipos compitiendo.
Una cuestión de calendario hizo pensar a los dirigentes en una definición breve. Por ese motivo se dividirán en dos zonas de 14 conjuntos. Allí sí jugarán todos contra todos, pero una sola vez. Los grandes rivales estaban separados de antemano. Eso explica por qué River y Boca o Independiente y Racing están en grupos opuestos.
Una decisión acertada es regresar con la famosa fecha de los clásicos. Teniendo en cuenta que esos rivales iban a estar en grupos diferentes, no se podía perder la esencia de las rivalidades tradicionales que tanto le brindan al fútbol argentino. En esta ocasión será la séptima jornada en la que se producirán esos duelos. Lógicamente algunos enfrentamientos no serán clásicos, sino los emparejamientos interzonales.
Esto hace que la ronda inicial conste de 14 fechas. Sin embargo, no todo concluye ahí. Por el contrario, es cuando comienza la mejor etapa. Los que avanzarán a la siguiente instancia son los cuatro primeros de cada zona. La fase final contará entonces con ocho conjuntos. Luego será todo bastante simple con encuentros de eliminación a partido único.
Los líderes se cruzarán con los cuartos del otro grupo. Los segundos harán lo propio con los terceros. Tanto los primeros como los escoltas jugarán los cuartos de final en condición de local. En caso de empate irán a penales directamente. Aunque hay una particularidad para destacar. Tanto las semifinales como la final se realizarán en territorio neutral.
Una situación que siempre genera atención es el sorteo. Ver qué encuentros podrían ocurrir o quiénes son los favoritos para acceder a los momentos decisivos es otra discusión muy interesante. Aquí quedan reflejados los integrantes de cada zona.
El grupo A lo conformarán Talleres, San Lorenzo, Defensa y Justicia, Sarmiento, Banfield, Argentinos, Gimnasia, Racing, Unión, Atlético Tucumán, River, Newells, Patronato y Platense. Del otro lado lógicamente esperarán Godoy Cruz, Huracán, Arsenal, Barracas Central, Lanús, Vélez, Estudiantes, Independiente, Colón, Central Córdoba, Rosario Central, Boca, Aldosivi y Tigre.
La gran novedad con respecto a la temporada anterior es que retornarán los descensos. Eso es indudablemente una mala noticia para muchos clubes, pero le devuelve algo de competitividad al torneo. Ahora no podrán descuidarse los equipos más humildes con que un armado de plantel con pocas inversiones no tendrá consecuencias. Lo que no es ideal considerando la enorme cantidad de equipos que hay es que apenas serán dos los que bajen de categoría.
El inicio está pautado en principio para el 11 de febrero. Si bien la programación original era otra, se tomó la decisión de postergar todo una semana. La preocupante realidad de los futbolistas con respecto al covid cuando volvieron de las vacaciones obligó a los directivos a tomar esa determinación. Eso implica que el receso entre los dos torneos ahora será menor por las obligaciones que genera el Mundial de Qatar 2022. Un premio adicional será la clasificación a la Copa Libertadores para quien se consagre.