No hay otra cosa en el horizonte para River. Es cierto que está compitiendo en el torneo local como todos los equipos de Primera División, pero la cabeza está en otro lado. Esta competencia es una mera preparación para lo que se le viene a nivel continental. Allí está la verdadera motivación del año.
El martes 24 de noviembre es la fecha que están esperando desde que concluyó la fase de grupos. Aunque luego de ganarlo ajustadamente comenzó a pensar en los octavos de final. Con 13 puntos superó a Liga de Quito, San Pablo y Binacional para quedarse con el primer puesto. Esto significa que podrá definir como local en la siguiente instancia.
Un equipo brasileño será el rival en cuestión por Copa Libertadores. Athletico Paranaense es precisamente quien determinó el sorteo para enfrentarse con el Millonario. Hay mucho conocimiento entre ambos clubes por los antecedentes cercanos. La final de la Recopa Sudamericana es el choque más importante.
Este es el motivo por el que hubo mayoría de suplentes en el encuentro frente a Banfield correspondiente a la cuarta fecha de la Copa Liga Profesional. Allí había iniciado con una derrota ante el propio Taladro, pero luego puedo recuperarse con dos triunfos. Godoy Cruz y Rosario Central son los que completan la zona.
La importancia que le da a este torneo es mínima porque el premio será un cupo para la próxima Libertadores. Eso podría motivar a cualquiera. Sin embargo, River ya está clasificado para esa edición por su participación en la Superliga pasada. Hay que recordar que allí finalizó en la segunda ubicación detrás de su clásico rival.
Por eso es que todo el foco estará puesto en lo que suceda a nivel continental. Las novedades de los últimos días son muy buenas para Marcelo Gallardo. La vuelta de los futbolistas de las distintas selecciones sudamericanas sin lesiones es indudablemente un factor clave para el entrenador de River.
Lo único que genera ciertas dudas es la situación de Nicolás de la Cruz. El mediocampista uruguayo debió estar aislado por varios días por el brote de coronavirus que hubo en la selección charrúa. Allí hubo varios infectados que hicieron sonar las alarmas en Núñez, siendo el más reconocido el delantero Luis Suárez. De la Cruz luego recibió testeos, pero aún no está confirmada su disponibilidad para ser titular en Brasil contra Athletico Paranaense.
La otra buena noticia pasa por dos regresos fundamentales para el funcionamiento del equipo. Ignacio Fernández está recuperado de un desgarro que lo alejó de las canchas por tres semanas. El volante es decisivo para que la circulación del balón de un ataque que depende mucho de la movilidad. Otro que regresará es Rafael Santos Borré. El delantero colombiano ya se encuentra disponible tras haber estado ausente por covid.
El escenario será el estadio Arena da Baixada. Ese sitio será testigo de la ida de los octavos de final que tendrá como árbitro al colombiano Andrés Rojas. Desde las 19:15 River intentará iniciar la serie con el pie derecho. Conseguir un gol como visitante podría ser el paso hacia adelante que le dé una ventaja muy interesante.